Microensayo recuperatorio de filosofia


Platon y la corrupcion 

Quizás uno de los problemas que más se trata actualmente y que ha sido tratado siempre y en todos lados es la corrupción, un hecho que a todos nos preocupa y que siempre ha estado presente, y cuando digo siempre, me remonto a las primeras sociedades de jefatura, en la edad de los metales. El poder siempre ha sido un imán de codicia, una codicia que viene dada por la necesidad de marcar la diferencia entre los demás, la necesidad de ostentar y ser mejor. Como vemos cada cosa encadena otra, por lo tanto, no es un solo problema, es un problema conjunto de una sociedad que piensa toda igual, es decir, probablemente todos, si estuviéramos en el poder, sentiríamos aunque fuera poco, la necesidad que he comentado antes, ya que el poder es un camino extremadamente fácil para poder robar y engañar a los demás. ¿A qué parece imposible tener un cargo de poder y no ser corrupto? Pues Platón, uno de los grandes pensadores de la Grecia Clásica, y que nos ha dejado importantísimas obras como su libro La República y concretamente el libro VII, con el mito de la caverna, trata este tema, la corrupción. Platón vivió uno de los episodios más oscuros de Atenas, primero la guerra del Peloponeso, luego el gobierno de los 30 tiranos, un gobierno de corruptos asesinos que apenas duro dos años, y finalmente la vuelta a la democracia, pero esta democracia no es como la anterior. En la etapa de la Pentecontecia, anterior a la guerra del Peloponeso, la Atenas de Pericles vivió la llamada democracia radical, y tras el gobierno de los 30 tiranos la teoría es la misma, pero en la práctica no. Platón vive esta nueva democracia llena de corruptos y eso explica su mentalidad y el motivo de su obra. El defiende la aristocracia, literalmente “gobierno de los mejores” pero no la aristocracia que conocemos sino una aristocracia que el propuso. Platón propuso una sociedad nueva, diferente, reformada y perfecta donde cada uno ocupaba un puesto y nadie era mejor que otro. Ese puesto lo ocupabas según la parte que dominase en tu alma, un tema que no voy a profundizar, pero que hay que tener claro que había tres clases sociales, los productores, cuya parte del alma que dominaba era la concupiscible, los guardianes que era la irascible y los gobernantes que era la racionalidad, y cada una de estas clases pasaba un proceso educativo distinto. De esta forma, los gobernantes, al pasar por una fase educativa muy compleja que les preparaba para poder ser verdaderos gobernantes ya que un productor, al no dominar la racionalidad en su alma, acabaría corrompiéndose. Por lo tanto, ahora no parece tan difícil ser corrompido, ¿no? Por desgracia, la propuesta de Platón nunca se llevó a cabo, y la corrupción ha seguido estando presente siempre, a pesar de haber otras propuestas de sociedades que evitan ese mismo fenómeno. Hoy en día de hecho, el partido político que gobierna en España tiene numerosos casos de corrupción como son el caso Gürtel, Púnica, Lezo, Nóos… En resumen, una lista absurdamente larga para ser de estas últimas décadas. Desde luego que viendo esto se quitan las ganas de creer en la política, ya que así, la democracia pierde su razón de ser, pero como Platón, se tiene que luchar por un futuro distinto al presente, con una clase política digna de tener ese nombre que vele por el pueblo y no por los intereses propios.

                                                                                                                           Rodolfo Luis Gonzalez

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